El anti poeta se levanta de su escritorio, repleto de borradores e intentos de poesía, musas descuartizadas, amantes suicidas, y efectivamente anda, utilizando sus pies, posiblemente descalzos porque las zapatillas se usan para dejar mensajes. Anda para recordar aquella tarde en la que paseando por un jardín decide colgarse de un pino y dejar una…… Seguir leyendo ¡Parra! Levántate y anda